Excursiones a Cayo Media Luna: vivir para contarlas
Este cayo es una gran roca sobre el mar, aprovechada para el ocio por la calidad de la playa
Publicado por Sol de Cuba, 31/08/2025

TEXTO y FOTOS: Román Romero López
Visto desde Playa Pilar, el islote parece más cercano, sin embargo, el periplo en catamarán, con el viento soplando a favor, tarda casi 30 minutos, aunque la percepción del tiempo es menor, debido a los atractivos de la travesía.
Aparece, ante los ojos del viajero, el mar con sus distintas tonalidades y aún en las zonas profundas las aguas semejan los cristales de una pecera y permiten observar el espectáculo de los peces y la belleza de los fondos, sobre los cuales surge una pintoresca barrera de corales.
La atención no tarda en desplazarse hacia el horizonte ante la cercanía de Cayo Media Luna, el destino tantas veces percibido desde Playa Pilar, con el deseo de surcar las aguas para vivir la experiencia mar adentro.
Cayo Media Luna es apenas una mancha en el mapa, con menos de 14 hectáreas y una historia fascinante entorno a los restos oxidados de un barco que se estima naufragó en el año 1920 al impactar con la barrera coralina.
Los restos de la embarcación a veces son visibles, pero cuando la marea sube apenas se distingue un bulto marrón rojizo de lo que se reconoce como un museo natural submarino, con cañones, hélices, anclas y pedazos de vida marinera atrapados en el silencio del coral.
Recorrer ese islote es una evocación al célebre escritor Ernest Hemingway, quien a bordo de su barco El Pilar transitó estos parajes en la década de 1930 y luego de la Segunda Guerra Mundial, obsesionado con la búsqueda de submarinos enemigos y la fuerza de la naturaleza.

Bordeado por hermosos segmentos de playa, ideales para practicar el snorkel, se presenta más alargado que ancho, con abundante vegetación, entre la cual predominan el pino y la casuarina, donde encuentran refugio numerosas aves que interrumpen la tranquilidad con su canto.
Sobre la superficie del lugar se descubre una abundante población de macaos, disfrazados con diversas conchas de invertebrados que habitan el ambiente costero; y aparecen también pequeños cangrejos rojos, con increíble agilidad para desplazarse y ocultarse entre las plantas y el dienteperro.
Este cayo es una gran roca sobre el mar, aprovechada para el ocio por la calidad de la playa, la posibilidad de realizar actividades acuáticas y las excelentes ofertas gastronómicas en un ranchón que se yergue entre los jardines conformados por la vegetación autóctona e introducida. Sobre la infraestructura creada por el hombre se ubica una línea de paneles solares, demostración de la apuesta por el uso de energías limpias.

Detalles y experiencias de un periplo
La Sucursal Marina Marlin Jardines del Rey, asentada en Cayo Guillermo, propone un acercamiento al llamativo islote mediante la excursión denominada Aventura en Media Luna, que incluye atractivas ofertas para grupos de seis personas.
Al llegar al punto náutico de Playa Pilar los clientes que eligen esta opción tienen reservados un soleador y tumbonas; luego, a las diez de la maána, salen en catamarán hasta la barrera coralina, donde pueden practicar snorkel durante una hora para una mejor observación de ese paraíso acuático y los restos de la embarcación que naufragó en esa área hace más de un siglo.
Posteriormente, los excursionistas son trasladados hasta Media Luna donde disfrutan de excelentes segmentos de playa con mayor privacidad y la oportunidad de descanso sobre tumbonas, muy cerca de la orilla.

Lázaro Germán Fernández, promotor de ventas y formación turística de la Sucursal Marina Marlin Jardines del Rey, aseveró que “en esa isla se encuentra el restaurante más lindo de la cayería norte avileña, con un almuerzo de ofertas variadas: pollo o lomo de cerdo como platos principales y el acceso a una pequeña mesa buffet con arroz blanco o a la marinera, ensaladas, frutas frescas, viandas, jugos y postres, además de las bebidas.
A las dos de la tarde los clientes retornan a Playa Pilar, donde disponen de tiempo libre en la playa, con acceso a diversos equipos náuticos durante una hora, hasta las cuatro.
Es una oferta dirigida, de manera fundamental, a turistas nacionales, con gran demanda en el periodo estival e ideal para el disfrute en familia, tal como expresa, en diálogo con Sol de Cuba, la joven Yoelis Azahares Rodríguez, cuya familia eligió Aventura en Media Luna para festejarle el cumpleaños.

“Nunca antes había visitado este cayo. Mi hermana, una prima y amistades me invitaron a conocerlo y me parece espectacular, no solo por el entorno, sino porque recibimos una atención de excelencia, con variadas ofertas gastronómicas.”
Amante del mar, esta avileña se sintió impresionada con la barrera coralina y los restos del barco hundido, experiencia que le provocó especial emoción en medio de las celebraciones por sus veinticinco años.
“La atención fue esmerada desde el arribo al punto náutico, donde el personal ofreció las explicaciones pertinentes para el desarrollo de la excursión, además de responder a nuestras preguntas y guiarnos para el pleno goce de una jornada de verano.”
Yoelis también tuvo palabras de elogio para Playa Pilar, calificada por ella como “la más bonita, mejor incluso que los balnearios de Cayo Coco y Varadero, sobre todo por la calidad del agua, la belleza del entorno y las blancas y finas arenas”. No dudó, entonces, en recomendar esta opción para el disfrute de dos lugares maravillosos.
Con igual periplo y opciones similares, la Sucursal Marina Marlin Jardines del Rey presenta Pilar Exclusiva, oferta especialmente diseñada para turistas internacionales, a bordo de una embarcación de dos pisos, cuya primera planta tiene un fondo de cristal con asientos alrededor para contemplar el entorno submarino.
Además, durante la travesía los excursionistas pueden escuchar música, disfrutar del paisaje, realizar fotografías desde una terraza, y lanzarse al mar con las facilidades que ofrecen dos trampolines.
El almuerzo en Cayo Media Luna reserva langostas y filete de pescado como plato principal, con la posibilidad de seleccionar otros en casos de no consumir mariscos, y, de igual manera, incluye una pequeña mesa buffet con otros alimentos, además de bebidas.
“Es una iniciativa que se ha mantenido en la preferencia de turistas canadienses y rusos, de manera esencial”, explicó Germán Fernández.
Durante su primera estancia en Cuba, el canadiense Jean Philippe Lagacé disfruta de esta excursión, “con un paquete completo: ambiente natural perfecto, principalmente por la playa, y excelente servicio; el personal se esfuerza para satisfacer las exigencias de los clientes.
“No me he sentido como en lugar turístico, sino en un clima familiar. Es buena opción, por tanto, la sugeriría a mis amigos visitar Cuba, en especial este sitio, sobre todo porque es seguro y relajante para los vacacionistas”.
Los criterios de viajeros confirman que más allá de Playa Pilar, no muy lejos, hay un pequeño y fascinante mundo por descubrir, incluso un espacio que convida a repetir la experiencia, porque queda el viajero como hechizado ante la perfección del entorno y las atenciones de un personal capaz de crear un ambiente ideal para el pleno disfrute.

