Pinar del Río Artemisa

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En 1982, Fidel expresó “[…] Pinar del Río ha sido famosa por la cantidad de lugares naturales realmente bellos […]”, y un cuarto de siglo después sentenciaba “Por sus bellezas naturales […] es un lugar privilegiado desde el punto de vista turístico”.
 
Vueltabajo, región más occidental del archipiélago cubano, tiene el privilegio de ser favorecida por la naturaleza y la cultura. Su espacio, hoy ocupado por las provincias de Pinar del Río y de Artemisa, ha concentrado innumerables atractivos turísticos, que le dan diversidad y potencialidad extraordinarias para la práctica de disímiles modalidades turísticas.
 
Su tierra fértil ha permitido la instauración de una práctica agrícola tradicional y centenaria, la producción del mejor tabaco del mundo, que manos laboriosas de varias generaciones han convertido en su razón de existir. La huella cultural del tabaco hoy es una de las mayores potencialidades turísticas de la región.
 
De todo este universo natural y cultural se ha servido el turismo vueltabajero en el último medio siglo, signado por la visión de futuro del líder de la Revolución Cubana, Fidel Castro Ruz, quien desde el propio año 1959 trazó los destinos del turismo en este territorio para convertirse en uno de los escenarios más paradigmáticos.
 
Pinar del Río se transforma en la fragua del turismo revolucionario cubano, al erigirse varios enclaves: surgen, con la tutela de Fidel, el motel La Ermita; el imponente Mural de la Prehistoria, en el valle de las Dos Hermanas, donde la vida muestra su evolución guiada por la mano del pintor; las cabañas de La Güira y el hotel Los Jazmines, inaugurado el 20 de mayo de 1960, primera instalación hotelera del país construida por el aún joven Gobierno Revolucionario.
 
A estos aportes del turismo revolucionario le sucedieron otros, siempre con la presencia pionera del guía de la Revolución Cubana, quien había elegido a Pinar del Río como un laboratorio para el desarrollo del país; nacieron, además, Laguna Grande, María la Gorda, Soroa, el complejo Las Terrazas, de belleza sin par, primera experiencia cubana de turismo sostenible. En los dos últimos escenarios, a los indiscutibles valores turísticos se les suman los culturales, al aflorar manifestaciones artísticas y tradicionales, tales como la música, la artesanía y las artes plásticas.
 
Un salto considerable en el turismo lo constituyeron las bases de campismo popular, cuyo bautizo fue en esta región para facilitar al turismo nacional conocer rincones escondidos de su naturaleza. Bases de campismo como La Caridad, El Taburete y Dos Hermanas, entre otras, son precursoras del turismo alternativo; en esta última se haría realidad uno de los sueños de Fidel, la apertura del museo donde se atesoran muestras de historia natural y vestigios de primigenios pobladores de la región, hecho que pudo apreciar personalmente en 1996, durante el acto por el XV Aniversario del Campismo Popular.
 
Complejo Turístico Las Terrazas
 
Es una comunidad turística rural de desarrollo sostenible, ubicada a orillas del río San Juan, dentro de la Reserva de la Biosfera Sierra del Rosario, Artemisa. Zona rica en ora y fauna, sitios históricos, lagos, ríos, cascadas y la presencia de un asentamiento poblacional de aproximadamente 1 000 habitantes. En 1990, comienzan los planes para organizarla como un
destino turístico, basado en sus múltiples atractivos naturales, históricos y socioculturales. En 1991, se dan los primeros pasos como entidad empresarial que rige el desarrollo turístico local, dando lugar a la primera experiencia rural de Turismo Sostenible en Cuba.
 
Es la tierra natal del cantante Polo Montañez. Su director Osmany Cienfuegos Gorriarán y el equipo de trabajo que dirige son an triones con un elevado sentido de pertenencia y apego a la preservación del peculiar entorno.
 
De igual manera, complementaron la obra revolucionaria en el turismo las adecuaciones en el balneario de San Diego de los Baños, el estreno del destino de naturaleza de Mil Cumbres, y la diversifi cación de la oferta turística en Viñales, convirtiéndole en una plaza excepcional.
 
Alrededor de esta variedad de escenarios vinculados a la naturaleza, no podían faltar sitios para el disfrute del sol y la playa. Sin ser esta la orientación turística de la región, posee playas de arena fi na y litorales conservados que le dan privacidad, entre las más reconocidas destacan: cayo Levisa, cayo Jutía, Las Tumbas y el Centro Internacional de Buceo de María la Gorda, que han tenido un desarrollo ascendente desde 1959.
 
Por todas sus bondades naturales y culturales, la región vueltabajera y cayos aledaños han recibido el reconocimiento de instituciones internacionales y cubanas con diversas categorías de conservación. Posee dos reservas de biosfera: Sierra del Rosario y Península de Guanahacabibes; tres parques nacionales: Viñales, Guanahacabibes y Cayos de San Felipe; así como el Valle de Viñales, categorizado como Paisaje Cultural de la Humanidad.
 
Su evolución histórica se remonta a milenios de presencia humana; signifi cativas huellas culturales aportaron los inmigrantes franceses al crear, a inicios del siglo XIX, una civilización cafetalera en la montañosa región de Artemisa, cuyas vetustas ruinas son altamente valoradas por quienes las visitan.
 
En el ámbito cultural, el vueltabajero ha cultivado diversas expresiones, sustento de su peculiar identidad. En las artes plásticas, el paisajismo constituye la corriente pictórica con mayor trascendencia, representada por creadores de la talla de Pedro Pablo Oliva. La música tiene su propio sello, fundada en las raíces populares, entres sus cultores emblemáticos emergen
fi guras como Enrique Jorrín, Pedro Junco y Polo Montañez. De igual modo, la literatura tiene en la presencia del novelista Cirilo Villaverde la máxima expresión.
 
Cuenta en la actualidad con 13 hoteles y villas, 11 de ellos en la provincia de Pinar del Río y dos en la de Artemisa; además,10 bases de campismo, 7 en Pinar del Río y  3 en Artemisa. La mayor parte de estas instalaciones están vinculadas a la modalidad de turismo de naturaleza. A ello se le suma una red de 14 restaurantes extrahoteleros, 7 en Pinar del Río y 7 en Artemisa.

Acerca de Jorge Freddy Ramírez Pérez

Organización: Comisión de Historia

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